Desde este blog siempre
hemos considerado que es necesaria una discusión sobre qué escuela queremos, y
eso lleva consigo una idea del significado de “Calidad educativa”. En esta
publicación, el autor hace un interesante aporte para ayudarnos en el debate.
Durante
las últimas décadas, en América Latina se ha hecho cada vez más usual hablar
del tema -calidad - dentro del lenguaje educativo, por considerar que las
connotaciones del tema conllevan implicaciones de orden ideológico y práctico
en la orientación de los procesos que relacionan con la educación, planteamos
la necesidad de un amplio debate teorfco que permita por lo menos, establecer
la validez del término en sus respectivos
Las
repetidas referencias a la calidad en términos de carencias o deficiencias y
como consecuencia de estados de crisis, han generado diversos puntos de vista
sobre la calidad de la educación, los cuales justifican el desarrollo de
investigaciones que aporten nuevos elementos teóricos y alternativas
metodológicas para comprender el tema en cuestión,
La
consideración de la calidad en su sentido más genérico, como “conjunto de
cualidades que constituyen la manera de ser de alguien o de algo", permite
concluir de entrada que cuando se habla de calidad de la educación, la
connotación será diferente a objetos de otra especie.
Al
parecer, las confusiones en tomo a los objetos educativos, han conllevado interpretaciones
que se han limitado a considerar segmentadamente la educación o que han
procurado identificarla con otro tipo de procesos donde es posible un registro
más cuantitativo, como en el caso de la producción Industrial.
En
el primer caso, son comunes las referencias a la calidad de la educación en
términos de rendimiento, insuficiencia o carencia de recursos, deserción y
cobertura, entre otros, En el segundo caso, se alude a estándares, niveles, optimización,
o eficiencia con respecto a una mercancía.
Asumiendo
una connotación de la calidad como “lo mejor”, habría que decir que con
respecto a la educación se debe entender desde
una perspectiva eminentemente histórica y social, por lo tanto, será comparable
en términos de espacio, tiempo, modalidad, metodología y según características
socio-culturales, definiendo el concepto en su especificidad, habrá que referir
calidades diferentes para la educación básica secundaria, la educación media vocacional
o educación superior; para la educación de la década de los setentas y la de
los ochentas: para la educación metropolitana y la educación de la provincia.
De lo anterior se infiere que admitimos una calidad “de
por sí” para la educación, Razón por la cual creemos que es una tautología hablar
de calidad de la educación.
Al considerar lo social como referente al análisis de Ia
calidad, nos identificamos con el investigador Ángel Facundo en que este es un
concepto esencialmente comunitario, el cual presenta a su vez relaciones con el
concepto de necesidad social, Por esta razón consideramos que es válido un
enfoque evaluativo en la Investigación de la calidad de la educación, puesto
que adquieren sentido las opiniones y percepciones de los diversos agentes que
tienen que ver con lo educativo ya que, si una educación satisface el mínimo de
necesidades sociales sobre el cual hay consenso entre los diferentes grupos, clases,
estratos, etc., entonces merece ser considerado de calidad, Según la cuantía de
la satisfacción será el nivel de calidad superior o inferior.
Por otra parte, si se torna La calidad desde la idea de “lo
mejor”, en el a la noción de calidad total, valdría la pena incluir los
conceptos de educación pertinente y de calidad de vida, puesto que tienen que
ver con la satisfacción de necesidades de grupos mayoritarios de la población.
Relacionando brevemente la educación como referente para el análisis
de la calidad, diríamos que lo cualitativo no lo entendernos en contraposición de
lo cuantitativo, por el contrario, asumimos que en una connotación de la
calidad intervienen consideraciones de orden cuantitativo, sin ser estas las
que primen en la determinación de la calidad de La educación.
En este sentido acogemos el criterio de calidad propuesto
por Antanas Mockus cuando plantea que la
calidad de la educación debe ser juzgada más como calidad dc una praxis que como
calidad de una producción.
Por lo indicado, los criterios de calidad no solamente la
circunscribirán al interior de La Institución escolar. Ella tiene en cuenta su
entorno social, razón por la cual tiene sentido hablar de educación pertinente,
entendida como aquella que posee calidad de pertenecer a un contexto socio-cultural
determinado. También en estos términos, adquiere vigencia la posición del
Movimiento Pedagógico cuando plantea que el reto de la educación contemporánea,
en torno a La calidad de la educación, debe centrarse en establecer un sistema
escolar que responda efectivamente a las aspiraciones de progreso y bienestar de
la inmensa mayoría de la población (Congreso Pedagógico Nacional, 1987).
Los planteamientos anteriores insinúan una toma de
posición frente a la calidad como un gran propósito, Por lo tanto, privilegiando
La idea de una educación con calidad, por encima de cualquiera otra
consideración, Asumirlo de esta manera presupone, ante todo, precisar el
concepto de educación según las condiciones concretas de la realidad que se
analiza, permite además, una operacionalización dcl concepto en la práctica, de
manera que pueda constituirse en un proyecto real en lo pedagógico y en lo
comunitario, y obviamente, involucrando lo participativo
Entendida en los términos anteriores, la calidad se
convierte en un problema de sentido para los actores participantes en dicho
proceso, puesto que, corno dice AntanHs Mockus, “una praxis escolar en la que no haya comunicación, o en la que esta no
tenga suficiente sentido para unos y otros, donde no se busquen y no se
encuentren vínculos significativos entre la vida y el libro, la vida y la
escritura, no es definitivamente, desde nuestro punto de vista, una praxis
escolar que pueda considerarse de calidad” (Educación y Cultura, octubre dc
1987). Así pues, como gran propósito y proyecto concertado, la búsqueda de una educación
con calidad compromete a toda la comunidad, puesto que sólo la acción de esta
garantiza que la educación sea propiciadora de sensación de segundad y de
realización social, que se concretice y ejecute como derecho, que llene
expectativas presentes v futuras y posea los recursos necesarios. En síntesis
que se convierta en un espacio real para la realización de la democracia.
Autor
Rodrigo Jaramillo
Roldán